aspectos gráficos de la escritura relevantes para la enseñanza de la misma
Desde siempre la escritura se ha caracterizado por su importancia y complejidad, pero la preocupación, tanto teórica como experimental, así como los procesos que la comprenden han sido relativamente escasos. Por lo que esto conlleva a obtener un nivel de metodología bajo y que, año tras año, se repitan las modalidades automáticamente, sin que exista un análisis crítico ni evaluación objetiva.
Hay que saber diferenciar entre la escritura script y la ligada, lo cual vamos a explicar a lo largo de este texto.
En la mayoría de las ocasiones los sistemas escolares utilizan la metodología script, debido a las siguientes ventajas que presenta, reconocimiento fácil, trazado simple, identidad entre los caracteres que el niño escribe con los que quiere leer.
Teniendo en cuenta las evidencias experimentales en relación con la rapidez, podemos afirmar que hay una diferencia significativa entre las velocidades de la escritura script y ligada, siendo la beneficiada esta última. A medida que los niños crecen, se ve favorecida la escritura ligada, ya que al principio es mucho más eficaz la escritura script por su facilidad de reconocimiento entre otras ventajas, pero poco a poco se muestra como la ligada termina beneficiando a obtener una mayor velocidad por causas del trazado y el ligado entre las letras. Esto se produce debido a que la escritura script se caracteriza por tener algunas dificultades como el retorno o repaso.
Las evidencias experimentales con relación a la velocidad de escritura, revelaron que los alumnos pueden llegar a dominar la escritura cursiva y que les proporcionará en un futuro numerosas ventajas a favor de la legilibilidad. Además, presencia otros muchos puntos positivos como la reducción de ciertos problemas de direccionalidad, potenciación de la velocidad y fluidez.
Una de las características más importantes, que justifican la adopción de la escritura ligada, es la comprobación de que constituye una respuesta motora continua. Estas una vez que son aprendidas son retenidas a un alto nivel de fijación en la memoria de largo plazo.
Por todo lo dicho anteriormente, se justifica que la escritura cursiva sea la que se utilice en el sistema escolar. Ya que los niños a partir del tercer año buscan enlazar las letras y, asi, impide que los niños tengan que enfrentar el cambio de escritura.
El modelo cursivo permite que el niño perciba cada palabra como un todo y evita la escritura sin los espacios correspondientes entre palabra y palabra, es decir, originando una percepción global de la palabra que va a dar lugar a un pensamiento escrito de unidad, ya que esto es una característica importante del lenguaje escrito diferenciado del oral.
Otro aspecto a tener en cuenta es que este tipo de escritura es el más común entre la población adulta. Sin embargo, el 80 por 100 del material de lectura suele tener un tipo de escritura script. Por ello, se considera importante que los niños sean capaces de leer los escritos, tanto en cursiva como en script, para potenciar el aumento de su función simbólica. Hay que tener en cuenta que es más fácil y rápido aprender la modalidad script una vez que se tiene adquirida la modalidad cursiva.
Finalmente, añadir que la escritura cursiva otorga al lenguaje escrito una calidad personalizada de rasgo y expresión.
También aparece como cuestión controvertida la enseñanza de la escritura, proporcionando ciertas pautas como el doble lineado o la cuadrícula. En el primer lugar encontramos una tendencia de defensa hacia tal postura, basada en la pedagogía tradicional donde se considera un medio de libertad y aceptación de la norma. Por otro lado, en este tipo de enseñanza, la motivación o atención hacia ciertas dificultades que pudieran presentar ciertos discentes queda relegada a un segundo plano.
Además, existen otros alegatos en su defensa, como puede ser la potenciación de la atención al tener que mantener una cierta fijación, el desarrollo de hábitos estéticos y de orden, la corrección de posibles problemas de disgrafía, o la ayuda hacia el alumnado para la situación en el espacio gráfico.
Con todo ello se puede deducir, que las pautas de encaminación de la escritura, pueden resultar positivas, siempre y cuando se tengan en cuenta ciertos aspectos, como la madurez que presente el niño respecto a su etapa evolutiva o la idoneidad metodológica.
Hay que saber diferenciar entre la escritura script y la ligada, lo cual vamos a explicar a lo largo de este texto.
En la mayoría de las ocasiones los sistemas escolares utilizan la metodología script, debido a las siguientes ventajas que presenta, reconocimiento fácil, trazado simple, identidad entre los caracteres que el niño escribe con los que quiere leer.
Teniendo en cuenta las evidencias experimentales en relación con la rapidez, podemos afirmar que hay una diferencia significativa entre las velocidades de la escritura script y ligada, siendo la beneficiada esta última. A medida que los niños crecen, se ve favorecida la escritura ligada, ya que al principio es mucho más eficaz la escritura script por su facilidad de reconocimiento entre otras ventajas, pero poco a poco se muestra como la ligada termina beneficiando a obtener una mayor velocidad por causas del trazado y el ligado entre las letras. Esto se produce debido a que la escritura script se caracteriza por tener algunas dificultades como el retorno o repaso.
Las evidencias experimentales con relación a la velocidad de escritura, revelaron que los alumnos pueden llegar a dominar la escritura cursiva y que les proporcionará en un futuro numerosas ventajas a favor de la legilibilidad. Además, presencia otros muchos puntos positivos como la reducción de ciertos problemas de direccionalidad, potenciación de la velocidad y fluidez.
Una de las características más importantes, que justifican la adopción de la escritura ligada, es la comprobación de que constituye una respuesta motora continua. Estas una vez que son aprendidas son retenidas a un alto nivel de fijación en la memoria de largo plazo.
Por todo lo dicho anteriormente, se justifica que la escritura cursiva sea la que se utilice en el sistema escolar. Ya que los niños a partir del tercer año buscan enlazar las letras y, asi, impide que los niños tengan que enfrentar el cambio de escritura.
El modelo cursivo permite que el niño perciba cada palabra como un todo y evita la escritura sin los espacios correspondientes entre palabra y palabra, es decir, originando una percepción global de la palabra que va a dar lugar a un pensamiento escrito de unidad, ya que esto es una característica importante del lenguaje escrito diferenciado del oral.
Otro aspecto a tener en cuenta es que este tipo de escritura es el más común entre la población adulta. Sin embargo, el 80 por 100 del material de lectura suele tener un tipo de escritura script. Por ello, se considera importante que los niños sean capaces de leer los escritos, tanto en cursiva como en script, para potenciar el aumento de su función simbólica. Hay que tener en cuenta que es más fácil y rápido aprender la modalidad script una vez que se tiene adquirida la modalidad cursiva.
Finalmente, añadir que la escritura cursiva otorga al lenguaje escrito una calidad personalizada de rasgo y expresión.
También aparece como cuestión controvertida la enseñanza de la escritura, proporcionando ciertas pautas como el doble lineado o la cuadrícula. En el primer lugar encontramos una tendencia de defensa hacia tal postura, basada en la pedagogía tradicional donde se considera un medio de libertad y aceptación de la norma. Por otro lado, en este tipo de enseñanza, la motivación o atención hacia ciertas dificultades que pudieran presentar ciertos discentes queda relegada a un segundo plano.
Además, existen otros alegatos en su defensa, como puede ser la potenciación de la atención al tener que mantener una cierta fijación, el desarrollo de hábitos estéticos y de orden, la corrección de posibles problemas de disgrafía, o la ayuda hacia el alumnado para la situación en el espacio gráfico.
Con todo ello se puede deducir, que las pautas de encaminación de la escritura, pueden resultar positivas, siempre y cuando se tengan en cuenta ciertos aspectos, como la madurez que presente el niño respecto a su etapa evolutiva o la idoneidad metodológica.